Viaje a Santander del 8 al 12 de agosto

Fátima y Benito habían alquilado un piso en Santander, nos invitaron a visitarlos y buscando huecos entre fiesta y fiesta nos fuimos unos días con ellos. Estaban Iker e Izascum cuando llegamos pero se iban esa misma tarde. El tiempo fue de temperaturas al estilo del cantábrico pero no vimos el agua por suerte. Pateamos Santander que es una ciudad de difícil pasear por sus cuestas te metas por donde te metas tienes que hacer subidas y bajadas. El piso estaba en un barrio totalmente en cuesta, de manera que ya sabías que o subías al salir y subías al regresar, eso lo tenías asegurado. Solo salimos un día a Cabárceno a visitar el parque natural, nos gustó mucho como lo tienen diseñado, pasamos allí todo el día, descansamos un poco comiendo y viendo una exhibición de aves rapaces, solo le encontramos un pero, y es que nos pareció cara la entrada, 20,20 € por persona. A la playa fuimos otro día por la mañana y al Faro Mayor otra mañana, por las tardes a La Magdalena y al centro a visitar la Catedral y pasear por sus calles y plazas y sobretodo a saborear sus pinchos que son espectaculares. Han sido unos días relajantes y de muy agradable compañía aunque con eso ya contábamos, era jugar a caballo ganador.