Marina nos levanta siempre el ánimo y consigue llevarnos donde menos nos esperamos. Se vino a dormir el sábado a casa y el domingo nos convenció para ir a Torrejón a ver un parque que habían abierto esta primavera y que no conocíamos. Resultó una salida muy agradable, hacía una tarde estupenda y nos lo recorrimos durante tres horas con alguna parada mientras ella disfrutaba en zonas de juego infantil. También montó en unas barcas y acabamos por cansarnos los tres, ella que no paró y nosotros que paramos poco. El Parque vale la pena, es original han construido copias de edificios emblemáticos de algunos países de la Unión y se puede pasar por ellos, está cuidado y lo completa distintas actividades para uso del público tanto infantil como adulto. La entrada es gratuita y las actividades se pagan. Hay un bar para descansar en la copia de la Puerta del Sol de Madrid y servicios repartidos por el parque. Es un sitio agradable para pasear y más con niños, había mucha gente pero se podía recorrer tranquilamente.
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