Aunque teníamos una mala experiencia del viaje de la Comunidad de Madrid cuando fuimos a Teruel nos animamos a probar de nuevo cuando vimos que los viajes incluían el AVE para el trayecto largo. Estrenábamos el AVE y además nos intentábamos quitar el mar sabor que nos dejo el famoso viaje a Teruel.
Salimos de Atocha y fuimos a Zaragoza, fue la primera experiencia y nos gustó sin dudarlo. Desde allí ya en bus a Huesca con visita guíada, por cierto con una guía que a mi me encantó, lo vivía de tal manera que transmitía todo lo que contaba de una forma que entusiasmaba, vimos la Catedral, la Iglesia de San Pedro el Viejo, la Plaza del Mercado y un recorrido por sus calles. Comimos y para Jaca que era allí donde estaba el Hotel. En el centro, estupendo para poder pasear después de cenar porque la temperatura era tan agradable que apetecían los paseítos nocturnos. Al día siguiente a Ordesa con un paseo corto por el hayedo en los pies, con el río en el recorrido y las montañas por los aires. El paisaje en todo el recorrido ha sido lo más de lo más. Por la tarde Echo y Ansó, dos pueblos típicos del Pririneo, con los tejados de pizarra, las chimeneas troncocónicas que se alzan majestuosas, las calles en cuesta y empedradas, las casas con talanqueras en las puertas para la nieve, y el enclave visto desde fuera. Aunque lo conocíamos no nos importo volver a disfrutar del paisaje, una gozada para la vista. El día siguiente visitamos Jaca, la Catedral, y la Ciudadela, dos sitios muy diferentes y dignos de ser visitados. Comimos y salimos para Andorra.
.jpg)
No hay comentarios:
Publicar un comentario