sábado, 9 de mayo de 2015

Empezando el Camino de Santiago. 4 de mayo












Pili propuso un día probar a hacer unas rutas del Camino de Santiago para ver si podíamos ser capaces de llevarlo a cabo. Yo me animé enseguida y Marino se ofreció a hacernos de coche escoba. Buscamos información y decidimos comenzar por Roncesvalles y hacer lo que pudiéramos sin  unas convicción excesiva de ser capaces de realizarlo. Reservamos en Erro y en Pamplona. Nos fuimos Pili, Primi, Alberto, Marino y yo. Salimos el lunes 4 y esa mismo día después de visitar San Jean de Port en la frontera Francesa y que nos gustó muchísimos nos pusimos manos a la obra y fuimos desde el Puerto de la Ibañeta al Alto de Mezquiritz, unos 10 km. para empezar. El segundo día Llegamos a Larrasoaña, 21 km. El Tercero a Pamplona, 22 km. El cuarto a Puente la Reina, 21 km. y el quinto a Estella, 23 km. Marino nos llevaba a la salida y nos recogía a la llegada donde nos esperaba con el restaurante buscado, la guía de información turística y nos llevaba a visitar la ciudad que el ya había pateado. Estos kms. también han sido bastantes por lo que a los del camino hay que sumar estos extras que los hacíamos como descansando. En Erro estuvimos en una Casa Rural y en Pamplona en un piso, esto nos ha mantenido en familia y hemos tenido lugar para compartir las opiniones del día y las cenas en algunos casos. Ha sido una experiencia muy agradable, la llegada al final de etapa era deseada cada día pero en cuanto descansábamos estábamos pensando en el día siguiente. Nos ha acompañado el tiempo, nos ha hecho buenísimo y la estación de año ha hecho también su parte porque el campo estaba precioso. No nos hemos hecho ni una ampolla, no nos hemos sentido mal en ningún momento así que hemos quedado con ganas de seguir, ojalá no se nos olvide y podamos continuar. Si Marino vuelve a animarse seguro que seguiremos porque ese apoyo es necesario, las mochila a la espalda es algo impensable para poder hacer distancias tan largas con sus subidas y sus bajadas. La ida la hicimos por Almazán, el único día que vimos llovizna un rato por la mañana, el resto nada de nada y eso que estaba previsto. La vuelta por Logroño y Soria. Logroño también lo hemos visitado y en Soria hemos comido. También hemos hecho un alto a la salida para ver la Iglesia de Santa María de Eunate que me ha encantado, la pena que no la hemos podido ver por dentro, pero ha valido la pena aunque fuera verla solo por fuera. De vuelta en casa y pensando en volver.

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