Sevilla. 5 de diciembre

Para ir a Sevilla el día ha empezado a las 5 de la mañana para salir a las 6,30, menos mal que nos acostamos  como las gallinas porque menudas vacaciones de madrugones. Para llegar ha Sevilla el autocar ha tenido que hacer parada en el camino así que había unos pocos kilómetros. La guía nos esperaba en el Palacio de San Telmo y nos ha llevado por el Barrio de Santa Cruz, hemos recorrido un montón de placitas y hemos bordeado Los Reales Alcázares. Este ha sido el mejor día en cuanto a la temperatura, nos ha hecho una mañana estupenda. Hemos entrado en la Catedral y hemos subido a la Giralda. La panorámica de Sevilla desde arriba es impresionante. A mi como me gustan tanto las alturas solo por esto hubiera valido la pena ir a Sevilla pero es que todo en Sevilla ha sido estupendo. Hemos llamado a María y a José Manuel y nos hemos vuelto a juntar después de 20 años sin vernos. Nos quitábamos la palabra, nos queríamos contar todo, preguntarnos por todo. Hemos comido juntos, hemos estado poco más de dos horas juntos pero ha sido estupendo. A las 4.30 salíamos de regreso a Marbella y a descansar un poco porque el regreso a Alcalá comienza mañana a las 7 de la mañana. A mi la verdad que esto de madrugar me va de maravilla porque he dormido fenomenal, uno de los días me he quedado frita poco después de las 10, lo que nunca me pasa en el día a día así que no hay mal que por bien no venga.