He dado por finalizada la restauración del mueble que empecé el verano pasado y que ha costado lo suyo el tema del lijado. Tenía muchísimas capas y no llegaba nunca al final. Lo he dejado en un tono más bien claro y no se si oscurecerlo un poco más. De momento me gusta así y así se va a quedar aunque en cualquier momento me da la vena y lo oscurezco, a saber.
Lo he rellenado con cosas que he ido encontrando más o menos antiguas, al menos me sirve para tenerlo todo recogido en un sitio concreto.
Ahora dejo la ebanistería para seguir de costurera, estoy liada con un mantel, a ver lo que me dura la labor.
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